“Esto va contigo” es una presentación abierta, en primera persona, de jóvenes masones que nos hablan de cómo y por qué llegaron a la Masonería.

Miguel Ángel Acebo, Mariano Beltrán y Sofía Cid forman parte de las columnas de la Gran Logia Simbólica Española. Son los tres primeros de muchos mas, hermanos y hermanas que nos contarán cómo lo ven o cómo se ven dentro de nuestra institución.

El camino de la Masonería no es adecuado para todos. Pero lo que representamos tiene sinergia con el tipo de cosas que son importantes para los jóvenes. Cada día, conforme se va dando a conocer, nuestra institución se valora más frente a otras y aumentan las llamadas a nuestra puerta.

Es importante el lenguaje que usamos para describir la Masonería, quedan por disipar muchos de los mitos que aún nos rodean como institución. ¿Cómo describir en términos sencillos, usando vocabulario moderno, de qué se trata? Hemos de comenzar a enfatizar el lado social de nuestras actividades, y cómo se ayuda a cada Mason individual a convertirse en la mejor persona que puede ser.

Cambiar nuestro lenguaje no significa cambiar nuestros principios.

Está claro que los patrones de trabajo han cambiado significativamente y es más complicado comprometerse para quienes tienen un empleo y obligaciones familiares. El compromiso, no es solo de tiempo, que se requiere, tiene que ser conocido por todos los que deseen iniciarse.

Tiene un gran atractivo unirse a una organización que es secular, multiconfesional, interconfesional y que comparte sus valores. Pero ¿de dónde salen exactamente estos miembros más jóvenes?

Ahora llegan muchas consultas a través de Internet. Todos los días recibimos cientos de visitas a sitios específicos de la GLSE y de nuestra logia, que luego se traducen en expresiones de interés. Un desafío importante para todos nosotros es respetar nuestras tradiciones, permanecer fieles a nuestros valores, al mismo tiempo que nos mostramos en el hoy y, por lo tanto, relevantes para las nuevas generaciones.

La Masonería ha cambiado a lo largo de su historia, conservando su carácter, formas y filosofía general: una hermandad que construye el carácter, orientada al servicio, que sienta las bases para que sus miembros desarrollen habilidades para la vida, ciudadanía, oratoria, trabajo en equipo, confianza y autoestima.